sábado, 6 de octubre de 2007

Y yo, ¿donde voy?

Tal y como teníamos previsto, hoy hemos almorzado juntos. Hemos tenido que esquivar a una de sus antiguas secretarias y a otros conocidos, pero por fin hemos conseguido compartir juntos un entrecot y unos calamares.

Resulta curioso: me paso la vida escondiéndome del resto de mundo, disimulando y tratando de disuadir cualquier sospecha sobre nuestra relación –exrelación- y luego me siento aquí y cuento hasta los detalles mas nímios de mis sentimientos y de nuestra historia.

Hoy me he sentido muy miserable. Supongo que nada tengo que ver con los héroes de Sir Walter Scott. No tengo ni el coraje ni la integridad de Rob Roy, ni la valentia de Ivanhoe. He dejado pasar la encrucijada de mi vida a cambio de un cierto nivel de bienestar, emocional y económico.

A estas alturas del partido, un buen número de mis amigos y compañeros han alcanzado lo que socialmente admitimos como el éxito. Unos por ser realmente inteligentes –brillantes, algunos-, otros por ser muy, pero que muy, listos y otros por ser muy, pero que muy, poco íntegros.

Yo, tal y como queda reflejado en estas paginas, solo soy bastante gilipollas. No doy para inventar, ni para crear, ni para organizar, ni para robar. Así que me he quedado donde estoy. Eso si, muchos acuden a mi en busca de consejo (¿?) y otros simplemente para que los escuche. Unos y otros acaban ganando pasta y yo apenas quedo en el papel de confesor.

Se que soy bueno en mi trabajo. Claro que solo lo se yo, pero eso no basta. No soy brillante, ni genial. Y cuando uno vive en el entono de la creatividad, de la comunicación, o de las relaciones públicas, lo único que no puede ser es efectivo, por que los efectivos resuelven y los creativos triunfan. Uno de los ejemplos mas claros es el amigo creativo de C. una tal ….P.

El tipo además de ser “superidealdelamuerte” y bastante –del todo- gay, es un creativo. No es malo, al contrario esta situado en la parte más alta del escalafón de la creatividad de nuestro entorno –la quinta provincia de España en población y el culo de Europa en creatividad-.

Junto a el se mueve, torpe y pausadamente, una de las mejores personas que yo he conocido nunca. Digamos que se llama S y que siempre tiene una palabra amable, un gesto cariñoso y un criterio empresarial mucho, pero que mucho, mas humano que sus amos. Pues bien, esos 150 Kg. de buena gente, han pasado a segundo plano –o tercero o cuarto- en cuanto ha aparecido el superguaydelamuerte de su creativo.

Esta misma sensación la puedo repetir con nombres y apellidos, de tipos con los que he crecido, aprendido, trabajado y servido. Así que con el paso de los años me siento una mierda. Una mierda debidamente pisada y arrastrada.

A lo largo de los últimos 25 años he trabajado para un montón de gente. Comencé en la política –siempre con los perdedores- en el lejanísimo año 81. Trabajé para líderes locales, provinciales y autonómicos. Participé en congresos, fui miembro de Comités Ejecutivos Nacionales, Provinciales, etc.…

De todo eso solo saque retrasos en mis estudios, algunas juergas –importantes- y un par de amigos (2, literalmente). Después trabaje, estudie, me hice sindicalista, asesor de nosequien, y finalmente eso que soy ahora y que no se bien que es.

En ese tiempo muchos florecieron en el camino. Ganaron, crecieron y triunfaron. Pero como muy acertadamente dice Woody Allen en “Manhattan”: los triunfadores no tienen pasado. Al cabo de los años descubro que he trabajado para mucha gente que no me ha pagado, ni me pagara y casi ni me recuerda -interesadamente-.

Quizá esa es una de mis escasas virtudes, mi capacidad para asesorar a la gente a la que aprecio. Los americanos, que son muy listos, han hecho de eso una profesión: los personal coaching.

Se trata de tipos que te aconsejan sobre todos los aspectos de tu vida: como vestir, con quien tratar, tu trabajo perfecto, que deporte hacer, como ligar, como abordar tus relaciones personales, con quien follar, etc.… Vamos, son como un amigo, pero cobrando. Yo debo de ser una especie de personal coaching. Pero gratis y con poco futuro.

Cuando conocí a mi mujer, lloraba en una esquina del patio de la facultad de derecho porque un profesor bujarra y cura –a la vez- le había suspendido el Derecho Romano. Era la primera vez que suspendía, la primera vez que alguien la ridiculizaba en público –era un examen oral- y la primera vez que fracasaba.

Me enterneció verla allí, sola, jodida y llorando. La convencí de que se equivocaba. Que no debía dar “un paso atrás ni para tomar impulso”. La ilustre sobre mis cuatro sucesivos fracasos en la misma asignatura. Le confesé de que el muy bujarrón me había intentado meter mano –era mi vecino en la playa y juro por dios o por quien sea que me toco el culo, y que me invito mas de una vez a repasar en su casa (seis pisos arriba de la mía)- .

Se calmo, se rió y nos fuimos a tomar una cerveza –lo único que yo hacia bien en aquella maldita facultad- y al final de aquella tarde de julio, ella había decidido –una vez mas- que seria abogada.

Hoy es una de las mejores –de las 3 mejores- profesionales del derecho de familia de nuestra provincia. Y aunque pueda parecer petulante, una de las mejores cien abogadas de este país en el ámbito del derecho de familia. Es extraordinariamente inteligente, es rápida, hábil, conoce su materia y sobre todo es terriblemente eficaz.

Sin duda todo son meritos suyos, pero quiero creer que en algo he participado yo. Durante todo el tiempo –solteros, casados, padres- la he apoyado, he tratado de simplificar las cosas, he asumido la mayor parte de las tareas de intendencia y he tratado de llevar mi casa como un buen padre y un buen amo de casa.

Sin embargo, si mañana decidiera presentar una demanda de divorcio perdería mi casa, perdería a mi hijo, perdería mi posición social, perdería un porcentaje elevadísimo de mis ingresos. En resumen, perdería mi vida. Tendría que volver a casa de mi madre con cuarenta y muchos años, sin un duro y debiendo hasta el “traje que me viste”, como dijo el poeta.

Ya se que es una pobre excusa –casi miserable, lo reconozco- pero no soy capaz de renunciar a TODO, absolutamente, a todo lo que he construido a lo largo de estos años. Se que Rob Roy lo hizo, y se alzó en armas contra el tirano deudor. Pero yo no tengo ni la talla física, ni la talla moral de héroe escocés. Por eso me siento una mierda.

Por eso y porque hoy he descubierto que hace un año que C, en su afán de acabar conmigo –con nuestra relación- estuvo apuntó –casi deseosa- de comenzar un idilio con alguien a quien yo apreciaba, muy sinceramente. Me pregunto, si tal era el deseo, ¿no seré yo una mala influencia para ella? ¿una relación nociva, inadecuada?

Que hoy haya huido a los brazos de un hombre libre y deseoso de tener pareja, no me parece criticable, es lógico: ella busca estabilidad, permanencia y cariño –casi conyugal-. Lo que me mata es que hace poco mas de un año, cuando comenzó a negarme el sexo, se lanzara a los brazos de un tipo –igual de casado que yo- pero mucho mas sinvergüenza.

Pasado el tiempo me pregunto ¿Qué era yo entonces para ella?
¿que coño he hecho yo a lo largo de mi miserable vida?

viernes, 5 de octubre de 2007

Un amor civilizado

Ayer cené con ella y hoy también almorzaremos. Me gusta la sensación de complicidad que se mantiene entre nosotros. Al parecer yo me he convertido en un tipo muy “civilizado”

Hemos hablado de sexo. Y en concreto del sexo con su novio. No lo hemos hecho de forma explicita y transparente –hasta ahí podíamos llegar!- pero han quedado claras muchas cosas.

Desde luego ha quedado claro que hay sexo entre ambos –vaya descubrimiento- lo que también me ha quedado claro es que hay buen sexo. Si he de ser sincero, eso me jode, me jode mucho. Pero claro, como soy tan “civilizado”, tan europeo, pues me tengo que aguantar. Creo que incluso me jode más que le llame para darle las buenas noches.

El sexo era algo importante entre nosotros. Se que si volvemos a estar juntos lo volverá a ser. Era tierno, sensible y cariñoso. Pero también era lúdico, intenso, kañero, salvaje, agotador. Ahora entiendo –a la fuerza ahorcan- sus sentimientos cada vez que yo hacia un viaje de fin de semana con mi mujer o cada vez que salíamos de fiesta con amigos o cuando pasábamos unos días fuera de casa y sin niño.

Nunca lo hablamos –ella no habla de estas cosas- pero ambos sabíamos que ese fin de semana yo practicaría el sexo conyugal. Mientras ella “arreglaba su casita, tra lara larita” –como la ratita presumida-. Nunca se quejó. No tuvo un mal gesto. No hizo ningún comentario. Si acaso algún mohín o una mirada esquiva.

Supongo que donde las dan las toman y callar es bueno. No obstante, sigo esperando que llegue el día en el que pueda volver a tener sexo con ella, el día en el que pueda estar con ella siempre y disfrutar de su cuerpo y de su alma.

Y con toda sinceridad: me da igual lo que haya hecho antes.

Yo soy muy bueno en el sexo. Tengo pruebas y partenaires que lo podrían corroborar.

jueves, 4 de octubre de 2007

LO QUE YO TUVE (¿tengo?) CONTIGO


ahora que paso
que ya el tiempo se a cargado nuestro amor
es ahora que tu y yo
comprendemos que dejarnos fue un error
momentos que viví
imposibles de volver a repetir
esas cosas de los dos
que buscamos desde entonces pero no

lo que yo tuve contigo fue un enredo tan divino
que en la vida no podré olvidar
fue la gloria, y fue un infierno
fue tan loco y fue tan tierno
que se sufre cuando ya no esta
lo que yo tuve contigo
tuvo clase tuvo estilo
y eso nunca lo podrás negar
aunque estemos separados
cada uno por su lado
es difícil olvidar

ahora escúchame
ya no hay nada que decirnos ni que hablar
y tu sigues donde estas
yo me quedo donde estoy que es mi lugar
la vida ha sido así
y lo nuestro ya es pasado ya no esta
no podemos recordar si la vida nos encuentra una vez mas

lo que yo tuve contigo
fue un enredo tan divino
que en la vida no podré olvidar
fue la gloria, y fue un infierno
fue tan loco y fue tan tierno
que se sufre cuando ya no esta
lo que yo tuve contigo
tuvo clase, tuvo estilo
y eso nunca lo podrás negar
aunque estemos separados
cada uno por su lado
es difícil olvidar

Jose Feliciano


Creo que ya lo he dicho en alguna otra ocasión, pero no consigo pasear por ninguna calle sin encontrar algo que no me parezca perfecto para ella. Da igual que sea una sortija, una chaqueta, un bolso o un maquillaje. Hasta las tapas de un bar o los panes en una panadería. Lo miro y de inmediato veo como le sentaría a ella, si le gustaría o como lo miraría.

Tengo que dejar de hacerlo, lo sé, pero el verdadero problema es que hace tiempo que veo el mundo por y para sus ojos. Pienso desde su perspectiva, a veces para adaptar el entorno a sus gustos, y otras para transformarla haciendo que haga suyo lo que a mí me gusta.

Se que no puedo/debo seguir dibujando figurines mentales en cada escaparate, pero cada vez que veo una falda de tubo, unas sabrinas, una blusa blanca –camisera, eso si- o unas botas negras, en seguida imagino como le sentaría y calibro si es para ella o no. Pienso como le quedaría el pelo mas corto, como seria si lo tiñera de caoba. No se, casi cualquier cosa me lleva a imaginarla a ella.

Últimamente he extendido ese hábito al cine, a la literatura o a la música. Ahora cada letra, cada libro o cada película me llevan a pensar en ella. Mención aparte merecen las músicas bailables –merengues, bachatas, salsas, boleros, etc...- Cuando escucho a Juan Luis Guerra o a Luis Miguel del Amargue, me muero por arrastrarla hasta un espacio mínimamente despejado y juntando nuestros cuerpos, dejarnos llevar por la música.
Supongo que la felicidad es algo así.

miércoles, 3 de octubre de 2007

La belleza de una flor.

Hoy he comprado flores. Iris y nardos. Los nardos tienen una belleza muy minimalista, poco llamativa, pero su perfume impregna cada rincón de la estancia en la que los colocas.

Los iris, sin embargo, tienen una aspecto delicado y sutil que combina dos colores casi incompatibles, como son el malva y el amarillo. La naturaleza es sabia, una vez mas, y nos muestra la belleza en un estadio basico y esencial, de suerte que siempre nos parece casi un descubrimiento que acabamos de hacer por primera vez.

Resulta curioso que los iris sean la flor de una planta bulbacea, como los tulipanes, por ejemplo. Es el mito del patito feo llevado al extremo, puesto que ¿hay algo mas deforme que una cebolla? y sin embargo, de un bulbo semejante a una cebolla, surge una flor bella, delicada y sutil que ha llegado a ser el simbolo de una casa real (si, los Borbones). Por eso yo siempre he pensado -y he ejercico- que tras un aspeco inicialmente feo o incomodo, se podia esconder una belleza sutil y resistente.

Supongo que por eso soy un enamorado de los tulipanes -sobre todo los "princesa irene"- y de los iris. Como lo soy de las obras de botero o de los edificios de Mies van der Rohe, o de los muebles de Alvar Aalto. Supongo que a estas alturas de mi vida, el concepto de belleza se ciñe a algo mucho mas esencial que la mera contemplacion del exceso de artificios que nos otroga el tiempo que nos ha tocado vivir.

Quiza por eso prefiero la belleza serena y madura de alguien como C, tan esencial y discreta. Supongo que para compensar mis excesos, mi vanidad, mi presuncion, mi jactacia, mi pedanteria y mi incontenible tendencia a tratar de se el centro de todas las miradas.

Supongo que existe un mecanismo universal de compensacion que lleva a que tipos como yo conozcan a pesonas como C y se enamoren perididamente, hasta necesitarlas como "el aire que exigimos trece veces por segundo, para ser" que hubiera dicho el poeta.

Solo se que si hoy se acabara el mundo, me gustaria compartir ese ultimo instante con ella.


PD:Las flores eran para C. se las he llevado a casa y le han gustado. Por supuesto me ha recriminado el hecho de regalarle flores, pero que leches: no me puede prohibir que la quiera, asi que no me va ha prohibir que haga una de las cosas que mas me gusta en el mundo: comprar flores.

Nos hemos sentido emocionados, a penas han sido unos minutos, nos hemos besado y he visto titilar sus pupilas al hacerlo. Sin embargo sus labios se han covertido en una frontera inexpugnable, tras la cual su lengua se ha escondido, privandome de su humedad y su pasion.

Lo entiendo, no me gusta pero lo entiendo. Me preocupa que poco a poco, en aras de guardar respetos, de acallar pasiones o de disimular deseos, este y otros gestos analogos, acaben con la pasion, que sin duda existe y que nos une.

Amar es ¿combatir?

Ayer toco excursión por la provincia, tratando de encontrar un local que nos permita preparar una de esas bonitas reuniones multitudinarias que tanto gustan al jefe de todo esto y a sus amos: El Consejo de Administración.

Como buen CEO que se precie (Chief Executive Office, en ingles, aunque para nosotros simplemente es el JEFE), mi nuevo líder tiene una visión precisa y exacta, maneja todas las claves necesarias para elegir y conoce en profundidad los principales elementos de la organización misión, visión y valores. Adicionalmente, es un tipo dialogante, accesible, respetuoso y llano. Y todo eso a pesar de llevar apenas dos meses al frente de esta organización.

Dicho de otra forma, es un petulante engreído, déspota y soberbio, que no tiene ni pajolera idea de cómo va esto, y que –según recuerdo yo y recuerdan nuestros mas antiguos amigos comunes- no le ha gustado trabajar en la vida. No obstante, estoy seguro de que terminaremos siendo excelentes colaboradores, a base de bajarme los pantalones y tragarme todo lo que haya que tragar.

Pues bien, resulta que para marcharme de excursión necesitaba un coche. El mió lo estaba usando mi esposa –en realidad es mas suyo que mío- y el de la empresa lo tenia un mecánico pasando no se que revisión. Así que pensé que a grandes males, grandes remedios y le pedí a mi secretaria que hiciera también de choferesa, al mas puro estilo de Camilo Jose Cela.

El trayecto fue largo, tuvimos varias paradas y además íbamos acompañados de mas gente. Las conversaciones giraron en torno a temas profesionales, alguna broma y cuestiones más o menos intrascendentes. Durante parte del camino fuimos escuchando el ultimo trabajo de Maná –amar es combatir- y yo no pude menos que quedarme absorto escuchando las letras.

Desde que apareció ese CD, me pareció que estaba hecho para mi, bueno para nosotros, para retratar nuestra relación. Desde “manda una señal” a “labios compartidos”, pasando por “bendita la luz” o “tu me salvaste”, parecían textos inspirados en nosotros, pensados para contar lo nuestro al mundo convenientemente disimulados para que no nos descubrieran.

Después de esta ruptura, de la aparición de una tercera persona –bueno, una cuarta- en esta historia, me siento mas identificado con otros temas del CD como puedan ser “ojala pudiera borrarte”, “arráncame el corazón” o “relax”, reflejan de una manera muy precisa mi dolor y lo que he venido sintiendo en algunos momentos de esta larga y desgarrada crisis.

Pues bien, a la segunda parada, mi secretaria, sin mediar aviso cambio las deliciosas letras de Mana por el meliflui tono de crooner de tercera de Michel Bouble. Al principio no me di ni cuenta, estaba enfrascado en nos se que discusión y pase mucho del tema. Finalmente, al decaer la debate, tome conciencia de que ya no estaban cantando los mejicanos, y le pregunte a mi secretaria

- Por que has quitado a Mana?
- Porque te estabas poniendo melancólico, y tenemos mucho que hacer.
- Melanque?
- Dejémoslo así, hay cosas en las que no tienes que pensar, por que te quedas hecho polvo.

Se hizo el silencio, y a mi se me quedo una cara de gilipollas que ni te cuento. Le dio voz a la cinta de Bouble y al momento alguien de atrás comenzó otra conversación intrascendente, que no tenia otro objeto que rellenar aquel incomodo silencio.

La verdad es que me jodio la frase y el tono, aunque tengo que reconocer que tenia parte de razón. No puedo dejar de pensar en C y en esta situación y no creo que me haga mucho bien. Es mejor estar ocupado, activo, distraído. No darle vueltas a una situación que ya no depende de mi. C ha tomado sus propias decisiones, y en los próximos días culminaran muchas de ellas, se pondrán en marcha nuevas situaciones y yo no tendré nada que decir. Salvo que la sigo queriendo.

Solo espero que no se olvide de mí, que me llame, que pida consejo para vestirse, que me pida algún favor, que me cuente sus cosas. Ya se que ella dice que todo seguirá igual siempre, pero ella y yo sabemos que las cosas se ralentizarán, que se enfriaran poco a poco, hasta que llegue el día que al mirarla a los ojos no encontrare la chispa de la pasión que hoy todavía veo.

Entonces, su respiración no se agitara, su cuerpo no se tensara, sus manos no trataran de rozarme disimuladamente, su boca no rozara la comisura de la mía esperando que en beso de vuelta mi lengua le devuelva un mínimo de pasión húmeda. Pero sobre todo, su mirada no será ardiente, con ese ardor que produce saber que quien esta a tu lado es para ti “lo mas grande de este mundo”

El día que eso ocurra, no se que voy hacer. Ahora mientras lo pienso y lo escribo mis ojos se llenan de lágrimas y el corazón de brumas, La sigo queriendo.

martes, 2 de octubre de 2007

ESO


Primero, que tu has sido para mi
lo mas grande de este mundoy que fui lo que tu digas
pero que hasta te regaba aquella risa
Dos que alguna quisimos compartir
el breve instante que es la vida
Y tres que hoy yo vivo en la ruina de un silencio,
que va dejándome sin voz


Lo que no entiendo
es que ahora vengas otra vez
a prometerme, una vida entera
pero a tu manera
en que momento de mi largo caminar
perdimos eso


verdad que soy difícil
pero he sido para ti
lo único profundo
también verdad
que procuraba estar contigo
cuando estaba mas confuso, tu tratando de existir
que me perdone el universo
y yo guardándome el secreto
que ya no quiero escuchar
otro bolero más
tu empeñada en que querías ser feliz
y no sufrir

Lo que no entiendo es que ahora vengas
otra vez prometerme
una vida entera; pero a tu manera
Dime amor en que momento de tu largo caminar
perdimos eso

pero yo, yo te buscaba
en los azules
y me enfrentaba a tempestades
y ahora no se si tu exististe
o eres solo un sueño que yo tuve
pero es que hay gente
que no consigues olvidar jamás
no importa el tiempo que eso dure

una frase resumió
lo diferente de los dos
hoy seguro ya no hay nada
lo dure amor, duró

no puede ser verdad
Si yo , si yo
te buscaba entre las nubes
y me enfrentaba a tempestades
y ahora no se si tu exististe
o eres solo un sueño que yo tuve
pero es que hay genteque no consigues olvidar jamás
no importa el tiempo que eso dure

no, no puede ser verdad, si yo; si yo ya no te busco en los azules
ni me enfrento a tempestades
ya no me importa si tu me quisiste
por que en mis sueños yo te tuve
es que además hay gente
que no consigues olvidar jamás
no importa el tiempo que eso dure.

Alejandro Sanz y Omara Portuondo

lunes, 1 de octubre de 2007

Hijo de puta

Abandonar, Afrentar, Arrinconar Avergonzar Burlarse Desdeñar, Desfavorecer Degradar Despreciar, Humillar, Mancillar Menospreciar, Ofender, Rebajar, Relegar Repulsar Repudiar, Ridiculizar Vilipendiar Ultrajar

Al parecer, los últimos tres años y medio han generado sentimientos como estos y aun perores. No se como hay alguien que libremente decida vivir esta especie de doloroso camino hacia ninguna parte, plagado de dolor tristeza y maltrato.

Considero que es imprescindible que alguien que ha vivido una relación asi la abandone de inmediato en busca de su libertad y su propia dignidad.

Lo que de verdad siento es que al parecer eso es loque yo he estado haciendo durrane los tres últimos años. No puedo creer que yo sea tan miserable, tan insesibel y tan hijo de puta.

Sin duda entiendo que si alguien se siente así, salga corriendo a los brazos del primer tipo que aparezca a su vera. Ahora bien, si todo esto tiene por objeto alcanzar una justificación para abandonarse a los brazos del primer músico de mierda que aparezca por el camino, me parece muy miserable.

Cuando alguien se siente así de mal, debe de marcharse sin más, mandar a la mierda a su carcelero y salir corriendo.

Al parecer yo soy mas hijo de puta y mas insensible de lo que pudiera pensar. Si esta noche consultaran a mi mujer y a mi ex amante, sin duda cualquier lector me condenaría a la guillotina.

Al parecer he cambiado mucho en los últimos dos días, en opinión de ambas. Debe de ser en lo único que estén de acuerdo, aunque no sepan porque

Cada minuto de alegria prepara un año de lagrimas.

Cuando C. me llamo el sábado para decirme que había roto con su novio, me sentí aliviado. Estaba muy preocupado por ella. Su tono de voz era triste. Parecía que habia desconectado y que su mente vagabundeaba mientras recorría las hileras de estanterías con ropa que no llego a comprar.

Tuve que asistir a un tedioso partido de basket acompañado de un grupo de compañeros de trabajo y como a mi el deporte me gusta lo justo, pase el partido enviándole sms y tratando de conversar con ella. Estaba distante, confusa y poco comunicativa.

Por la tarde, cuando por fin pude hablar con ella, mientras volvía de su ciudad, me encontré con su voz distendida y vivaracha. Estaba contenta y tranquila. En principio me alegre y se lo dije. Pero de inmediato me sobrevino una sensación casi dolorosa:

- ¿Has hablado con tu músico?
- Si
- Y ¿Cómo habéis quedado?
- Mejor
- ……
- Que quiere decir mejor?
- Hombre, hemos decidido aflojar un poco y vernos para hablar…

Cagada. Si habíamos dado un paso atrás, ha sido únicamente para tomar impulso. Tiene toda la pinta de afianzarse. Trato de convencerme de que nosotros seguiríamos igual, que no quería hacerme sufrir –ni a mi, ni a el- pero en el transcurso de la conversación se dibujaron escenarios de su relación que no solo no rechazo de plano, sino que los acaricio como se abraza a un antiguo que ya habíamos dado por imposible y habíamos arrumbado en el baúl de los recuerdos.

Le hable de verla casada –“eso nunca”-, de vivir con el –“bueno eso……-, le dije que no la veía como ama de casa –“ me encantaría ser ama de casa, pero podría trabajar”- ni como señora de – “me encontrarían trabajo”-. Sentía como seguía el camino de dejarme y marcharse definitiva.

Tanto en esa conversación como en el posterior intercambio de sms nocturnos, trato de hacerme ver lo mucho que me necesita y lo importante que soy para ella. Aunque mi tono puede dar que pensar otra cosa, lo cierto es que la creo. Estoy seguro. Es mas, necesito creerla, pero eso no impide que mi capacidad prospectiva y mi insitito me digan que la estoy perdiendo, que se me escapa como arena entre los dedos. Y no lo puedo remediar.

No he pegado ojo en toda la noche y esta mañana he tenido que llamarla pidiéndole que me diera que me quiere y que no me va ha dejar. Me lo ha dicho, y me ha pedido que sea mas positivo. Pero yo no puedo. Algo me dice que esto se acaba y no hay quien lo pare.

A la hora del almuerzo, bueno casi del aperitivo nos hemos vuelto a ver. Todo me ha quedamos mas claro, bueno en realidad mas oscuro. Poco a poco ella ha recuperado el control de su vida, mientras que yo sigo sin saber.

Además de recriminarme mi neurótica manía de investigar sobre su novio, me ha expuesto con claridad y con serenidad lo que ocurre, aunque no me ha descubierto gran cosa, únicamente ha venido a confirmarme lo que yo ya preveía.

Ella me quiere, me quiere mas de lo que ahora quiere a su novio. Por esa razón no ha querido avanzar en su relación. A la vez, ha esperado para que yo decida que quiero hacer si me separo o no. Puesto que yo no me decido a separarme –no puedo enterrar 24 años de mi vida en 15 días, sin una causa aparente y sin que se sepa que es por causa de C- y aunque ella lo entiende perfectamente, ha decidido avanzar en su relacion, dejar caer el lastre que yo supongo y montarse una nueva vida con el musico de los cojones