domingo, 18 de enero de 2009

HABANA BLUES

CANCION

Un reportaje sobre el 50 aniversario de la revolución cubana que emiten en Televisión Española, me ha revuelto lo mas profundo de mis sentimientos. Me siento mal, muy mal.

Mientras y o escribo estas letras, sentado en mi cómodo estudio, auxiliado por una copa de güisqui de malta, mi amigo Luiso esta detenido en un centro de internamiento de La Habana, acusado de no se sabe que cuestión sobre la gestión económica de una empresa mixta. Tiene cojones.

Luiso es un tipo legal. Legal en todos los sentidos: honesto, respetuoso con la ley en todo su ámbito, amable, solidario, generoso y sobre todo buena gente. Sin embargo, hoy se encuentra preso de un Estado que no detalla los motivos de su detención, que no garantiza sus derechos como detenido y que no puede responder de la imparcialidad de su Justicia.

Es jodido, muy jodido, para alguien que siempre ha defendido la Revolución Cubana, con criterios mas o menos izquierdosos, tener que reconocer que la falta de seguridad jurídica que hoy genera el Estado que surgió de aquella revolución.

Algo se de derecho –poco, lo justo- pero, a estas alturas del siglo XXI, soy capaz de distinguir la indignidad, y me parece indecente e intolerable ver la horrorosa metamorfosis que ha sufrido la Revolución Cubana, merced a la mediocridad y la miserable ineptitud de algunos de sus mesiánicos dirigentes